EXPLOTACIÓN INFANTIL Y LABORAL.
La explotación infantil o también llamado "esclavitud infantil" es la utilización, de menores de edad por parte de adultos, afectando con ello el
desarrollo personal y emocional de los menores y el disfrute de sus
derechos.
La explotación infantil incluye:
• Trabajo infantil antes de la edad legal mínima: la edad legal mínima en la que los niños están autorizados a trabajar es de 15 años (14 en los países en desarrollo).
• Las peores formas de trabajo infantil: consisten en
todas las formas de esclavitud o prácticas similares, como el trabajo
forzoso, la trata, la esclavitud por deudas o la servidumbre. Esto
también incluye actividades ilícitas y/o actividades que puedan poner en
peligro la seguridad, la salud y la moral de los niños, como la
prostitución...
• Trabajo forzoso: comprende tareas domésticas
realizadas durante largas horas en un medio insalubre, en lugares
peligrosos que requieran el uso de materiales o herramientas peligrosas o
que fuercen al niño a cargar objetos que son demasiado pesados.
La explotación laboral se define como recibir un pago inferior al trabajo que se realiza, lo que incluye desde pequeños abusos hasta los talleres de trabajo esclavo.
Consiste en:
- Trabajar jornadas seguidas sin tener descanso alguno (como mínimo 12 horas entre jornadas).
- Trabajar exceso de horas. Cuando se estipula en el contrato x horas y se trabaja realmente x + n horas de más.
- Trabajar en días festivos y no ser remunerados.
- Exceso de tareas.
- Impago o retraso de los pagos (cobrar el mes siguiente lo que tendría que haber cobrado el mes anterior).